Podrían ocasionar graves afectaciones a la salud, como deshidratación, sobre todo en población infantil o adulta mayor
Con la temporada de calor más fuerte del año, conocida como “canícula”, es común que se presenten casos de deshidratación, sobre todo por enfermedades diarreicas, por lo que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomienda extremar precauciones para evitar estos padecimientos.
“La deshidratación es muy común en estas fechas, y ésta es la pérdida excesiva de líquidos a través del tracto digestivo, puede ser por vómitos o por diarrea. Ésta última es una alteración caracterizada por un aumento en el volumen y la frecuencia de deposiciones, en comparación con las condiciones fisiológicas normales”, recordó el director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 46, en Culiacán, Eduardo Encines Ortiz.
Hizo hincapié en que las medidas de prevención son de vital importancia, sobre todo el lavado de manos y el mantener una hidratación adecuada durante esta temporada.
“Las medidas de prevención, en este caso, son aumentar la ingesta de líquidos, lavarse las manos antes de preparar los alimentos, así como antes y después de consumirlos, y antes y después de ir al baño”, recomendó el médico.
Como principales causas que originan las enfermedades diarreicas, el galeno destacó las infecciones gastrointestinales por el consumo de alimentos en descomposición o preparados con medidas inadecuadas de
higiene, por lo que recomendó no adquirir alimentos en la vía pública, y en caso de hacerlo, asegurarse que hayan tenido una refrigeración adecuada.
“Es importante evitar el consumo de alimentos preparados en la vía pública, y cuando queremos consumir, por ejemplo mariscos y pescados, debemos cerciorarnos de que estén bajo refrigeración y no consumirlos si permanecieron durante mucho tiempo a temperatura ambiente”, señaló.
Entre los más vulnerables de sufrir deshidratación en temporada de calor, se encuentran los niños menores de cinco años y los adultos mayores de 65 años, indicó.
Encines Ortiz recomendó estar atentos a los síntomas de deshidratación, como irritabilidad, llanto sin lágrimas, piel y mucosas secas, pulso rápido y débil, respiración acelerada, palidez de piel e incluso fiebre.
“Lo que debemos hacer, principalmente, es no automedicarnos, preparar un sobre de Vida Suero Oral en un litro de agua, y empezar a darlo en tomas, dependiendo el número de evacuaciones, entre 250 y 300 mililitros por cada vómito o evacuación. Hay que estar reponiendo la misma cantidad que se pierde, para evitar la deshidratación”, recomendó el especialista.
Asimismo, indicó que la no tolerancia a la vía oral, es decir, que el paciente no pueda comer o beber sin vomitar, es un signo de alarma y se debe acudir de inmediato con su médico para evitar complicaciones, que pueden derivar hasta en la pérdida de la vida.
Finalmente, invitó a la población en general a solicitar los sobres de Vida Suero Oral en sus Unidades de Medicina Familiar (UMF), ya que son totalmente gratuitos y ayudan en gran medida a prevenir la deshidratación.
