El Covid-19 ha puesto contra las cuerdas al futbol
profesional y no hay muchas opciones. Las nóminas de los jugadores son
insostenibles sin actividades ordinarias y de no llegar a un acuerdo de
reducción de sueldos, en caso de decretarse oficialmente contingencia sanitaria,
los equipos tendrían la facultad de otorgar una indemnización del
salario mínimo a todos sus empleados, incluyendo a los que menos ganan y
tienen la necesidad de contar con su salario íntegro, como los
futbolistas de fuerzas básicas, las integrantes del equipo femenil, y
hasta jardineros o cocineros.
El abogado laboral, Ernesto de la Puente, del despacho Santamarina y Steta, explicó a Excélsior que “hay una disposición específica que dice que en la suspensión de labores por contingencia sanitaria
los patrones están facultados para pagar dicha indemnización por cada
día que dure la suspensión hasta por 30 días”, de acuerdo con el
artículo 427 fracción séptima, de la Ley Federal del Trabajo, así como
el artículo 429, fracción cuarta.
Sin embargo, aseguró que
oficialmente aún no se puede aplicar ese estatuto. “El gobierno fue muy
cuidadoso en no decir específicamente la frase –declaratoria de
contingencia sanitaria–, por lo tanto los patrones tienen que continuar
con el pago del salario regular a todos”, subrayó.
No obstante, algunos equipos de la Liga MX
se han adelantado a reducir o por lo menos retener un porcentaje del
sueldo de los integrantes del primer equipo, como el Atlas, Santos, y el
Querétaro. Esto ayudaría a seguir pagando el total del salario de los
empleados menos privilegiados de los clubes.
El amortiguador, partidos a puerta cerrada
Uno de los principales problemas sembrados por el coronavirus y que está aumentando la deuda de los equipos de futbol es el incumplimiento con los patrocinadores,
de acuerdo con Aldo Ricardo Rodríguez, abogado especializado en
deportes y que ha colaborado con varios clubes de la primera división.
Los clubes tienen un tema de incumplimientos de compromisos con patrocinadores, con ausencia de ingresos por taquillas, con abonados que no pudieron ir a los partidos, y un cúmulo de temas financieros muy complicados que no tienes cómo solventar. Vas a estar en deuda de aquí a que se pueda resolver, y vamos viendo si el siguiente año los patrocinadores buscan un acuerdo por el tiempo en el que no recibieron beneficios de la relación”, explicó a Excélsior.
Rodríguez Cortés apuntó que en situaciones normales, la
mayoría de los equipos de primera división viven con números rojos, lo
que podría llegar a ser insostenible con la crisis actual. “Puede haber un colapso.
Los gastos más importantes de los equipos son las nóminas de los
jugadores, sin futbol el sistema colapsa, porque de por sí el equipo de
futbol no es un negocio que deje utilidades de forma recurrente”, dijo. “Este momento corre peligro incluso la supervivencia de algunos clubes”.
Sin
embargo, hay una luz al final del túnel que no es posible ejecutar de
manera inmediata, pero quizá sí en algunas semanas: reanudar la liga con
duelos sin público. “Se acolchonaría mucho el golpe porque podrían cumplir compromisos comerciales con patrocinadores,
generar contenido para las televisoras, y la gente estaría muy
concentrada en el futbol porque sería el único evento”, aseveró.
De momento esto es inviable, pero dependiendo del avance del Covid-19 en México durante el mes de abril, podría tomarse una decisión para reanudar de esta manera las actividades en mayo.