Se vendió como el mejor partido de la jornada, pero la realidad es que estuvo muy lejos de cumplir con la expectativa, pues ni Rayados ni América brindaron emociones ni buen futbol, al final ganó Monterrey 1-0, pero dejando mucho qué desear en el accionar.
Un penalti de Rogelio Funes Mori en la primera parte, su tercer gol del torneo, le bastó a los dirigidos por Javier Aguirre para sumar seis puntos, pero de nuevo con uno más en la cancha se vieron mal y el rival estuvo a punto de empatarlo en la última jugada del partido.
Los Rayados salieron intensos, circulando rápido el balón y llegando dos veces por banda derecha con centros peligrosos en los primeros tres minutos. América no podía salir jugando, tenía que saltar líneas, pero sin poder ganar los balonazos. Su primer intento fue al 11’ con un tiro de Sebastián Córdova.
A pesar del dominio albiazul, en 15 minutos no había generado una clara de gol, es más ni siquiera disparado al arco y poco a poco las Águilas fueron teniendo más el balón.
La primera de Monterrey llegó al 30’, cuando Funes Mori dentro del área disputó el balón con los centrales americanistas, alcanzó a puntear el balón ante la salida de Guillermo Ochoa, pero salió por encima.
Al 33’ el árbitro Jorge Pérez Durán marcó penalti por una mano de Ramón Juárez, Rogelio Funes Mori aprovechó y con disparo al centro marcó el 1-0 al 35’, su tercer gol del torneo y segundo de pena máxima.
Para el complemento, ni Aguirre ni Solari hicieron cambios, pero las Águilas sí salieron diferentes en busca del empate, con mayor intención de jugar en campo rival y no esperar, mientras Rayados esperaba con la idea de matar en contragolpe.
Al 82’, Sebastián Córdova se fue expulsado por una fuerte entrada en el medio campo y si el América estaba en problemas, ahora las cosas se veían más que complicadas, porque no generaba futbol y no sabía contener al rival.
Con uno menos, las Águilas se vieron mejor, aprovechando que Rayados se tiró atrás para guardar el marcador, pero sin fuerza al frente, con más ganas que calidad. Todavía al 94’ Emmanuel Aguilera tuvo el empate, pero no pudo conseguirlo.
Al final, Monterrey mantuvo la ventaja, pero a Javier Aguirre seguramente no le debe haber gustado la forma de sumar una segunda victoria, porque si bien los puntos están en el casillero, el buen futbol no apareció por ningún lado.
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