De acuerdo con un comunicado de la UNAM, el dispositivo se encuentra en fase de prototipo, diseñado con periféricos de entrada y salida, mismos por los que el potencial paciente podría sopar directamente, para después enviar la señal a una computadora y con el resultado, el médico podría obtener elementos suficientes para generar un diagnóstico.
“En el aliento se pueden encontrar sustancias que pueden generarse en varias enfermedades para lo cual hay que hacer una calibración precisa para diagnosticar cada una de ellas, entonces la idea es entrenar a estas narices para determinar los compuestos que estarían asociados a una enfermedad en particular”, comentó Celia Sánchez, investigadora del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología de la UNAM.”
En las afecciones renales incrementa el amoniaco en el asma suben niveles de óxido nítrico, el cáncer de pulmón produce monóxido de carbono y en la esquizofrenia detecta etano.
En este momento la nariz electrónica se empleó con éxito de manera experimental en diferentes laboratorios del mundo y se seguirán haciendo pruebas para que en el futuro podría comercializarse.
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